viernes, 4 de febrero de 2011

De mi libro “Sé feliz. El poder de ser consciente”.


-Si no vaciamos el exceso de bullicio de la mente cómo vamos a relajarnos, a descansar, si precisamente lo que hacemos es añadir más y más emociones, más información, más confusión. Antes de seguir recogiendo más desperdicios debemos vaciar el cubo. Pero cómo hacerlo: meditando. Es el único estado en el que la mente descansa y a la vez está alerta.

3 comentarios:

  1. Una manera meridianamente clara, de explicar la función de la meditación.Aunque en el Zen decimos, que hay que buscar sin buscar.
    La mente necesita alimentar su actividad, aunque sea procesando vasura televisiva, por ejemplo. El silencio nos purifica,y entonces aparecen la intuición y la inspiración.

    Por otra parte, no dejas de sorprenderme Raúl, eres un sabio.

    Luis Troyano

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  2. Gracias Luis, la práctica zen es un buen camino hacia uno mismo. El silencio, la mente en calma… , y surge, como bien dices, la fuente de la inspiración, la intuición y lo mejor de nosotros.

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  3. Simplemente respirar, sentir el ir y el venir de la respiracion te devuelve al ser mas puro. Me ha gustado mucho tu libro Raul.

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